Entra en fase crítica ocupación hospitalaria

^{Imagen de portada: Medica Sur}

La Laguna de Coahuila es ahora escenario en curso de una segunda ola de la pandemia de COVID-19. Al finalizar la tercera semana de octubre, la red hospitalaria del sector público de salud en el municipio de Torreón  ha entrado en una fase crítica de sobrecarga, debido a la alta frecuencia de nuevos casos  registrada en los últimos días: cuatro de las seis clínicas principales reportan condición de alerta máxima al llegar o aproximarse al punto de saturación. 

Así, en paralelo a la intensidad activa por la aceleración de contagios, en esta ciudad de 744 mil 847 habitantes ha tenido lugar un aumento en la demanda de camas disponibles para pacientes con síntomas graves del síndrome respiratorio agudo que causa el nuevo coronavirus SARS-CoV2. 

De acuerdo con información de la Red de notificación sobre Infección Respiratoria Aguda Grave (Red IRAG), este viernes 23 de octubre alcanzaron su nivel máximo de disponibilidad el Hospital General de Zona (HGE) 18 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y la clínica del Instituto de Seguridad Social al Servicio de los Trabajadores del Estado (ISSSTE). 

Dependiente de la Secretaría de Salud estatal, el Hospital General de Torreón acumuló un registro de 91% en ocupación para su área COVID (28.5% del total de sus camas censables). Por su parte, el HGZ 16 del IMSS reflejó 87%, es decir, 37 internamientos con respecto a 42 camas. En el caso del Hospital Militar Regional, con 13 pacientes recibiendo atención médica al interior de sus instalaciones, el rango de demanda atendida se ubicó en 65 puntos porcentuales. Finalmente, por debajo del 40% de ocupación apareció la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE) 71 del IMSS. Los datos aportados indican la estancia hospitalaria de 36 pacientes, con una disponibilidad de 100 camas. 

Cabe mencionar que esta excesiva presión hospitalaria se encuentra influida por un factor de contexto geográfico y poblacional. Si bien las unidades médicas de atención para pacientes  graves por COVID en La Laguna de Coahuila se concentran en Torreón,  los datos refieren una connotación regional. Por lo tanto, la sobrecarga estaría incluyendo también a derechohabientes y personas procedentes de los municipios de Viesca, Matamoros, San Pedro de las Colonias y Francisco I. Madero. 

En este sentido, la integración estadística implicó agregar referencias de información por parte de las Secretarías de Salud federal y estatal; documentos obtenidos vía Plataforma Nacional de Transparencia y la Base de Datos Abiertos sobre Establecimientos de Salud en México. 

La tendencia

Un marco de referencia esencial para entender esta nueva lógica de intensidad conlleva necesariamente revisar la dinámica reciente adquirida por la pandemia en distintos planos. En primera instancia, el surgimiento de rebrotes a escala global. En un segundo término, se encuentra la tendencia interna en México, inherente a una frecuencia de aumento en la positividad de nuevos casos, misma que ha derivado en frenar el declive que se prolongó desde la tercera semana de julio hasta la tercera semana de septiembre. 

En el caso específico de la región lagunera, es posible inferir que esta segunda cresta en la propagación de COVID-19 está relacionada con al menos cuatro factores: 

1. Un relajamiento social observado a partir de la segunda quincena de septiembre, marco temporal de las fiestas patrias de Independencia. 

2. El aumento en la movilidad ciudadana a consecuencia de reaperturas en distintos ámbitos económicos. 

3. La inserción de las campañas políticas para renovar Congreso Local como factor asociado a concentraciones y ruptura del distanciamiento social indicado por las autoridades. En las acciones de proselitismo emprendidas por distintos partidos y  candidatos fue pública y notoria la convocatoria presencial de simpatizantes. 

4. La realización de fiestas y eventos sociales que implicaron brotes, sobre todo entre la primera y segunda semanas de octubre. 

Considerando esta serie de variables como elemento clave, observamos de qué manera surgió un primer pico de 32.5% al finalizar septiembre. Y justo a partir de la segunda semana de octubre es cuando despega la trayectoria sostenida de ascenso presente. Aparece un despunte inicial de 45.1% el día 13, rompiendo con la línea de seguridad que prevaleció el mes anterior: un rango que fluctuó entre 25 y 30 puntos porcentuales. 

Luego sobrevino un ligero descenso, sin embargo fue de corta duración. A partir del lunes 19 la curva de hospitalización se empezó a pronunciar. Pasó de 52.8 a 68.3% el día 22 y cerró el viernes 23, alcanzando la proporción general de 72.8%. De esta manera, el aumento en cuatro semanas se multiplicó 2.7 veces,  representando 166.6%. 

Ante este panorama, los integrantes de la Mesa de Salud de La Laguna dieron  a conocer públicamente su preocupación desde el miércoles 21. Mediante un comunicado, externaron la situación límite que afronta el sector ante la velocidad de transmisión proyectada por el coronavirus. 

"Los contagios han crecido más de 30%, las hospitalizaciones se han duplicado en tan solo dos semanas, (y) la tasa de transmisión efectiva se elevó hasta un 40%". 

Desde otro frente, hoy domingo 25 de octubre, personal médico del sector privado hizo un público un llamado a la comunidad lagunera para hacer conciencia del grado de crisis sanitaria en que se encuentra la región. Acentúan su mensaje en la sobrecarga de trabajo y la condición de máximo riesgo al estar en el primer frente de contención. 

"Los aquí firmantes somos parte de la comunidad médica y paramédica de La Laguna, verdaderamente preocupados y ocupados por la situación de salud en la que nuevamente nos encontramos hoy en día por el COVID-19. Los contagios han crecido ya por arriba de un 60%, los hospitales privados están completamente saturados y los hospitales públicos corren el riesgo de continuar a ese ritmo". 

Al igual que en la publicación precedente, lanzan un mensaje con fines disuasivos, a fin de reducir la movilidad, evitar la socialización festiva durante las próximas tres semanas y tomar las medidas preventivas de sanitización e higiene personal. Con respecto a la autoridad municipal, la exigencia consiste en aplicar con rigor las sanciones correspondientes y denunciar actos que pongan en riesgo de contagio a los ciudadanos. 

Desde principios del mes, el estado de Coahuila se ubicó entre las 10 entidades con mayor tasa de casos activos por cada 100 mil habitantes, de acuerdo con el Sistema de Información Geográfica sobre COVID-19 en México de la UNAM.

De igual manera,  Torreón apareció ayer sábado 24 como el municipio con la novena incidencia nacional más alta (114) en el cambio de positivos semanales; relación estadística donde Querétaro aparece al frente con 405 casos por cada 100 mil habitantes. 

Y es en la ciudad más poblada de la  región lagunera donde se acentúa en este momento la saturación hospitalaria en la entidad. Según la Red IRAG, mientras que su porcentaje de ocupación municipal rebasó al inicio de este fin de semana los 72 puntos porcentuales, la habilitación de camas COVID-19 se ubicó en una proporción general de 39.8% en todo el estado. 

JCNava